Obligaciones del presidente de una comunidad de vecinos

Las obligaciones del presidente de la comunidad de vecinos están reguladas por la Ley de Propiedad Horizontal (LPH) en España. Este cargo es esencial para el buen funcionamiento y gestión de las comunidades de propietarios. Aquí te dejo un resumen de sus principales responsabilidades:

1. Representación Legal: El presidente actúa como representante legal de la comunidad de vecinos en todos los asuntos que afecten a la misma, tanto en juicios como fuera de ellos.

2. Convocar Juntas: Es responsable de convocar las juntas ordinarias y extraordinarias, así como de establecer el orden del día para las mismas. También debe presidir estas juntas.

3. Ejecutar Acuerdos: Debe asegurarse de que se cumplan y ejecuten los acuerdos adoptados en las juntas de propietarios.

4. Gestión y Administración: Puede encargarse de la gestión y administración de la comunidad, aunque muchas veces esta función se delega a un administrador de fincas profesional.

5. Custodia de Documentos: Tiene la obligación de custodiar los libros de actas y demás documentos importantes de la comunidad.

6. Relación con Proveedores y Servicios: Supervisa los servicios y contratos con proveedores, como el mantenimiento, la limpieza, el seguro de la comunidad, etc.

7. Resolución de Conflictos: Actúa como mediador en conflictos entre vecinos y vela por la convivencia y el cumplimiento de las normas de la comunidad.

8. Control de Gastos y Presupuestos: Supervisar los gastos y gestionar el presupuesto de la comunidad, asegurándose de que las cuentas estén claras y bien administradas.

9. Velar por el Mantenimiento y Conservación: Debe preocuparse por el buen estado de las instalaciones y elementos comunes, proponiendo las reparaciones necesarias y vigilando su ejecución.

10. Comunicación y Transparencia: Mantener a los vecinos informados de las gestiones realizadas y de cualquier asunto relevante para la comunidad.

11. Gestión de Cobros y Morosidad: Facilitar la recaudación de cuotas y gestionar la morosidad, incluyendo la posible iniciación de acciones legales para el cobro de deudas.

El presidente puede contar con el apoyo de un vicepresidente y de un administrador de fincas, pero la responsabilidad última de todas estas funciones recae sobre él, salvo que se delegue formalmente alguna de ellas.